La madrastra deliciosa se folló a su hijastro. La salvaje Deauxma sigue dando destellos de su sucio deseo a otros hombres. El fuego comienza a arder cuando ella canta y baila mientras él la devora hasta que alcanzan el clímax. Esto marcado como un viaje 'lleno de fetiches' se adentra en los territorios de la fantasía y el placer.