Las hermanastras perdidas quieren dinero de su ex hermanastro y terminan haciendo una petición muy extraña. La más joven es una belleza, una belleza latina, latina para ser precisos, primero que todo su redondo y curvilíneo culo jugoso y luego lo toma, gimiendo de placer y corriéndose. Un cuento de hadas familiar sin pretensiones e insutil para adultos.